La metalurgia es una rama de la ingeniería encargada del estudio de los metales y su transformación en productos útiles para la sociedad. Estos metales se utilizan para la fabricación de una extensa gama de productos desde los más sencillos hasta los más complejos: dispositivos electrónicos, electrodomésticos, automóviles y aviones, por mencionar solo algunos.

La industria metalúrgica es un sector de la economía dedicado al procesamiento y producción de metales a partir de minerales y concentrados. Incluye la extracción de minerales metálicos como el hierro, el cobre, el aluminio, el oro y la plata, así como la posterior refinación y transformación en productos finales. Es un factor clave en la economía mundial.

La metalurgia también resulta importante para el desarrollo de infraestructura, siendo una aliada de la ingeniería y arquitectura puesto que proporciona materiales indispensables para la construcción de edificios así como de carreteras, puentes y otras estructuras.

Por otro lado, la industria energética se enfoca en producir y distribuir energía, lo que incluye la generación de electricidad, producción de combustibles fósiles (como gas y petróleo) así como el desarrollo de tecnologías para la energía renovable como la energía eólica y solar. Al igual que la metalurgia esta industria también es fundamental para la sociedad moderna puesto que proporciona la energía necesaria que alimenta la economía global y las actividades de la vida cotidiana.

Estas dos industrias, la metalúrgica y la energética resultan entonces estrechamente vinculadas porque la primera es fundamental para la producción de muchísimos materiales que se usan en la industria energética.

Muchos de los materiales que se usan la industria de los energéticos, como el acero, aluminio y cobre son producidos mediante procesos metalúrgicos. En la industria energética dichos metales se usan para construir estructuras metálicas que dan soporte, así como turbinas, tuberías y demás componentes indispensables. El acero es usado en la construcción de torres de energía eólica, el cobre se utiliza para la producción de cables y demás componentes eléctricos. El aluminio se usa para construir paneles solares y baterías.

De tal modo que una industria es soporte y aliada de la otra, y juntas contribuyen al desarrollo y crecimiento de la sociedad moderna.